CUESTIÓN
México y sus entidades sin más opción que la unión contracíclica…
Crisis mundial, fortaleza de mercados Estados Unidos y Asia
Marco Vinicio Jaime
El panorama es sin duda desolador. El mundo enfrenta el peor decrecimiento económico desde la Gran Depresión de 1929 y su réplica de la postguerra de 1945, nominado con acierto por el Fondo Monetario Internacional (FMI): “El Gran Confinamiento”, a causa de la pandemia por Covid-19. Las potencias y países emergentes han coincidido en una apuesta altamente riesgosa para la salud, pero de vida o muerte para su propia subsistencia como sistemas gubernamentales y de orden socioeconómico: recuento de daños y reactivación productiva contracíclica de cara a una “nueva realidad”.
De cierto, el regreso a la “nueva normalidad” en una “nueva realidad” económica y productiva exigirá de sectores involucrados, empresas, trabajadores y autoridades, -tanto de Estados Unidos, como epicentro pues de la recuperación, como de México, con mayor razón, en cada Entidad Federativa y Municipio- una gran labor de inteligencia y destreza para asegurar primero, protección sanitaria: vida y salud, y en lo subsecuente conjunción estratégica de ideas e inventiva para optimizar en tal círculo virtuoso el recurso disponible y de inversión: poder adquisitivo para la cobertura de necesidades elementales, al igual que para la adquisición de productos y servicios creados como solución de las propias carencias surgidas en la peor crisis de los últimos tiempos. Ésta pues, podría ser la clave de los planes emergentes en obvia conjunción de esfuerzos gobierno (en sus diferentes poderes y órdenes), medios de comunicación, empresarios, sectores productivos y sociedad en general...
Domingo 17 de mayo de 2020/Leer más »
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